La metodología Moskali integra un número importante de elementos, pero no por ello resulta difícil o costosa la implementación de la metodología.
El requisito fundamental es la disposición de los dueños y/o directivos y/u otros miembros relevantes de la organización para realizar un cambio de fondo en sus organizaciones, principalmente la disposición a cambiar sus creencias e ideas preconcebidas, que en muchos casos resultan limitantes para el desarrollo de las organizaciones.
El proceso inicia con el establecimiento de preliminares: identificar objetivos, obtener información, transmitir conocimientos básicos y definir un plan general.
Posteriormente se realiza un análisis de la situación actual: ¿Cómo se encuentra la organización actualmente?
Después se realiza un diseño de la nueva estructura de la organización ¿Dónde se desea que se posicione la organización, y cuál debería ser su estructura para ello?
Finalmente se realiza la implementación. Los nuevos sistemas pueden ser complejos o sencillos, pero deben mantener congruencia entre sí, y entre el modelo y el funcionamiento. Asimismo, muchos de los cambios tienen que ver con la forma de pensar de las personas, especialmente con sus creencias o patrones de conducta, por lo que se aplican técnicas tales como programación neurolingüística y entrenamiento dirigido.